Educación infantil para el consumo responsable
No acabamos de adquirir un producto cuando a través de los medios de comunicación y la publicidad se nos está incitando a consumir de nuevo. Quizás, ahora con las rebajas, es el momento adecuado para plantearnos a donde nos lleva este consumismo, si necesitamos tanto como tenemos, si realmente estamos atrapados y no podemos dejar de adquirir cosas nuevas o si es el momento adecuado para ser críticos y elegir un tipo de consumo más responsable y sostenible. De nuestro ejemplo, nuestros hijos aprenderán sobre el consumo crítico, sostenible y responsable
No, no me mires con expresión de extrañeza adulta y déjate sorprender. El pester-power es cuando los niños ponemos cara de corderito mientras te miramos fijamente a los ojos diciendo “lo quiero ... lo quiero...” o “cómprame… cómprame…”.
Seguro que alguna vez has sido víctima de esta insistencia por parte de tus pequeños ¿me equivoco?
Hace unas semanas analizábamos las causas en este artículo y es que este anglicismos podría traducirse como "la presión a la que sometemos a los padres para obtener bienes de consumo determinados".
Actualmente, los niños hemos ganado un enorme peso en las decisiones familiares sobre la compra. Resulta impresionante el nivel de influencia que tenemos a la hora de escoger unos productos u otros, y no solo en cuanto a bienes específicamente infantiles, sino de todo tipo: coches, detergente, electrodomésticos… No es de extrañar que cada vez más campañas publicitarias se dirijan directamente a nosotros. Los creativos han descubierto un filón: “si quieres que compren tu producto, véndeselo al niño”. Aquí tienes un ejemplo.
En un artículo de la revista Emprendedores, que ha leído mi madre, se afirma que el 70% del consumo en España corresponde a hogares con hijos menores de 14 años, que sin embargo solo son el 37% del total. Cuatro de cada nueve productos que se compran, con nosotros presentes, son para nosotros porque así los hemos pedido. No es sorprendente?
Las rebajas suponen un consumo inmediato y desmedido, por lo que los adultos deberíais ser los primeros en plantearos el nivel y hábitos de consumo. Es imprescindible conocer y enseñarnos la diferencia entre un consumo necesario para vivir y un consumismo marcado por intereses ajenos a nuestra propia voluntad.
Por suerte, la tendencia del consumo responsable está en auge. Pero sería interesante una educación para el consumo que se incluya en los planes de estudio, porque el imparable aumento del consumo infantil y del uso de la infancia como oportunidad de negocio o nicho de mercado, son ya una realidad.
Debemos aprender a ser ciudadanos responsables, solidarios y críticos con el consumo de productos. Comprar con criterios de responsabilidad personal y colectiva. Fomentar el consumo sostenible, de productos locales y de temporada, y respetuoso con el medio ambiente.
Consejo para padres: Si quieres tener un conversación sobre el tema, y hacer una reflexión sobre los hábitos de compra y las estrategias de publicidad, puedes usar estas webs para iniciar el diálogo con tus hijos:
. Ecologistas en Acción (trata tema de rebajas, grandes superficies ...)
. Consumer Classroom (comunidad digital para que los profesores de la UE recopilen recursos sobre la educación del consumidor)
. Fundación Vida Sostenible (publica recursos y documentos para compras responsables)
. Economía Solidaria (da consejos para el consumo responsable)
Nosotros compramos con mucha moderación porque mi marido en esto es especialista, cuando yo quiero comprar más de la cuenta me dice que no hace falta, que lo deje y que nos vayamos jajajaja
ResponderEliminarUn abrazo, feliz año nuevo :)
Qué gracia! Ya tiene un sistema infalible que funciona,jajaja.
EliminarFeliz año también para tí.
Wow que post tan interesante, me ha encantado. Yo estoy intentando educarlo en la educación responsable, me horrorizo cada vez que veo esas bacanales de consumo sin sentido.
ResponderEliminarGracias por los recursos webs y por la reflexión
MUAC!
Gracias a tí por pasarte Xènia. Los hechos de los padres son los que enseñan más a los hijos que cualquier discursos, así que hay que empezar por uno mismo y no sucumbir a los "chollos" sin antes preguntarnos "¿realmente lo necesito?" (aunque sea difícil a veces). Un abrazo.
EliminarQue razón tienes Hugo. Anda que no sabeis los niños mirar con cara de corderito. Un beso y feliz 2017!!
ResponderEliminarJajaja, así es difícil resistirse verdad?
EliminarFeliz año!
Cuanta razón!! Un post muy interesate, para hacernos reflexionar sí o sí... Cuantas y cuantas veces nos han puesto esa cara de corderitos (como bien dices) y no hemos podido resistirnos... Aunque estoy contigo en que es importante enseñarles los valores con el ejemplo, es sin duda alguna lo que más funciona. (y últimamente lo voy consiguiendo...¡bien!, jejejeje)
ResponderEliminarBesitos!
Buen trabajo!!!! Algún capricho controlado, como cuando mi madre me autoriza a comprar chuches, también sienta bien. Eso sí, siendo conscientes de que no es "imprescindible".
EliminarUn abrazo Sonia.
Como siempre tus post son súper interesantes. Desde mi punto de vista puedo decirte que muchas veces somos los propios padres los que empujamos este consumismo en el niño, me explico.... No se si sabes que trabajo en un supermercado, muchas veces tenemos en cajas productos para aumentar la venta final, bien, cuando son Donuts o chocolates los propios padres se giran al niño y le preguntan - ¿Quieres donuts?- Obvio si al niño le gusta seguramente dirá que sí. Como este ejemplo yo veo en mi día a día muchas cosas de este tipo, hay veces que son lógicas y otras que no, puesto que debería ser una decisión de los padres y no de los hijos. Siguiendo con el ejemplo de antes, cuando a los dos días esa familia vuelve a la tienda y vuelvo a ofrecer los donuts la madre dice que no puesto que los anteriores ni se los ha comido, el niño pone ojitos y dice eso de porfa porfa que esta vez si me los como y se oye eso de... Vale pero como no te los comas ya no te compro más... Ejem ejem, todos sabemos que no es así y volverá a caer otra vez.
ResponderEliminarYo he llegado a la conclusión de que viene el en pack de ser padres jejeje
Le daré un vistazo a esas webs que seguro me vendrán muy bien en el futuro.
Besos!!
Un buen ejemplo de que se actúa muchas veces sin pensar. Sin ver que, más allá de no ser necesario, es además un gasto inútil.
EliminarEse pack de padres hay que ir puliéndolo poco a poco siendo conscientes de nuestros errores primero, y tratando de mejorar con nuestro ejemplo. El camino está lleno de brechas, pero está bien saber dónde se encuentran.
Un abrazo grande
Gracias muy interesantes los libros también y qué bueno tener una publicación en un medio nacional de prensa!. Un abrazo.
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